Hace ya muchos meses sonaba el telefono de mi estudio y al otro lado escuchaba una voz muy dulce pidiendome cita para una sesión de comunión, era la mamá de Jana y me contaba que Jana, al ver pùblicadas en este blog algunas de mis fotos de comunión habia dicho yo quiero que esta sea mi fotógrafa... así es Jana una niña con las ideas claras, sumamente educada pero con un punto  "trastin" que hizo que la sesión fuese tremendamente amena y divertida. Jana tb tenía muy claro que tipo de reportaje quería y quería uno de esos repor especiales donde una parte transcurre en mi estudio y otra después de la comunión la hacemos en el exterior... cuando los papis de Jana me contaron dónde querían hacer los exteriores, me acordé de la primera vez que fuí a ambos sitios y de aquel primer impacto que ambs tuvieron en mi por su belleza... La primera localización fue la iglesia de Alevia situada en un marco incomparable y con un 360 grados de paisaje imponente sobre un inmenso valle y unas montañas igual de imponentes y después el puente de piedra de Trescares que cruza un río de cristalinas aguas turquesas, un enclave privilegiado.